Las uñas enterradas o los uñeros no son divertidos y causan gran dolor cuando uno mismo o la del pedicure las trata. Pero aquí están las buenas noticias: Hay una manera correcta para eliminarlas. Así que antes de que se resignes a cojer el dolor, lee esto.
Cómo prevenirlas
La mejor manera de lidiar con una uña encarnada es mantener la forma de la uña correcta. A diferencia de las uñas de las manos, que le puedes dar la forma que te apetezca (ya sean cuadradas, ovaladas, "squoval," estilete, lo que sea), la forma de las uñas de los pies debe de ser: en línea recta. El redondeo de los bordes, o las esquinas de las uñas, o el corte de la uña demasiado corto puede conducir a las uñas encarnadas.
Cuando usas zapatos demasiado pequeños y apretando los pies, básicamente estas pidiendo una uñas encarnadas. En los dedos gordos es donde aparecen con mayor frecuencia.
Cómo salir de una uña encarnadas
Puedes tratar de remojar los pies en agua tibia con sal de Epsom una vez o dos veces al día para mantener el dolor al mínimo. Si sigue doliendo, con hilo dental inserte suavemente una pequeña cantidad entre la esquina de la uña y la piel. Haga esto por unos días. Y si esto no funciona o la uña está infectada llama al experto en esto.
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